1.- EUROPA
El Territorio Europeo:
Europa es un continente de extensión reducida, situado n el hemisferio norte, aproximadamente entre los 35º y los 72º de latitud norte.
El relieve de Europa se caracteriza por el predominio de las llanuras (72% del territorio) y la escasa altitud media (340m). En él se distinguen:
· Las montañas viejas. Se sitúan en la zona noroccidental y central del continente. Presentan relieves muy erosionados, de formas onduladas o planas. Entre ellas destacan el Macizo Central francés, los Vosgos y los Alpes escandinavos, entre otros.
· Las llanuras. Ocupan una extensa zona de forma triangular que se extiende de oeste a este del continente, desde Francia hasta los montes Urales. Sobresale la Gran Llanura Europea.
· Las montañas jóvenes. Presentan gran altitud y están situadas en la zona meridional del continente. Entre ellas se encuentran los Alpes, los Apeninos, los Cárpatos, etc.
El medio físico europeo ha favorecido el desarrollo de la actividad humana. La antigüedad del poblamiento y la intensa ocupación del territorio han dado lugar a un paisaje muy humanizado. Europa ha sido cuna de importantes civilizaciones (griega, romana, cristiana…), que han tenido una gran influencia en la actual cultura europea (lengua, derecho, arte…). Europa cuenta con una gran diversidad de estados, tanto por su número como por su tamaño, y régimen político (monarquías parlamentarias, repúblicas, principados, confederación).
En Europa occidental predominan los sistemas democráticos, de gran tradición y muy consolidados. Los países de Europa oriental han experimentado la transición de regímenes comunistas a otros democráticos.
Con respecto a la organización territorial europea, desde la caída del imperio romano de occidente (siglo V d.C.) se sucedieron diversos intentos de unificación política que dieron origen a numerosas guerras. Tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Europa occidental conoció un proceso de integración que culminó con la creación de la Comunidad Económica Europea (actual unión Europea). En la actualidad, el espacio europeo presenta una gran diversidad: destacan un núcleo central muy desarrollado (desde los países nórdicos y Reino Unido hasta el norte de Italia) y una periferia menos avanzada (la mitad centro oriental del continente y, en menor medida, la meridional). La ampliación de la Unión Europea es un paso muy importante para la integración europea.
La Población:
Europa cuenta con más de 730 millones de habitantes, que representan el 11,2% de la población mundial. Su densidad de población es elevada (69,4 hab/km2), la segunda del mundo después de la de Asia.
La población se distribuye por el continente de forma irregular. Existen grandes contrastes entre unas zonas densamente pobladas, sobre todo en Europa occidental, central y meridional (sudeste del Reino unido, Países Bajos, Bélgica, Alemania, norte de Italia, costa mediterránea italiana y española), y otras con bajas densidades (áreas montañosas y norte de Europa).
La evolución de la población europea ha seguido el modelo de transición demográfica. En la actualidad, como consecuencia de las bajas tasas de natalidad y mortalidad, el crecimiento natural se encuentra en una fase de estancamiento; en algunos países, incluso, llega a ser negativo. Esto se debe a que en estos países la mortalidad supera a la natalidad, a causa del envejecimiento de la población.
Las migraciones han afectado históricamente al continente europeo. Hasta mediados del siglo XX, millones de emigrantes salieron de Europa hacia otros contenientes, sobre todo con destino a América. Entre la segunda mitad del siglo XIX y el primer tercio del XX, abandonaron Europea casi 50 millones de emigrantes.
A partir de la segunda mitad del siglo XX, el desarrollo económico de Europa occidental atrajo hacia esta zona a inmigrantes jóvenes. Actualmente, destaca la emigración desde la Europa centrooriental hacia la occidental. Asimismo, están llegando a la zona occidental del continente inmigrantes procedentes de otros contenientes: norte y oeste de África, sudeste asiático, Iberoamérica, etc.
La estructura por edad de Europa corresponde a la de una población envejecida debido a la baja natalidad y a la elevada esperanza de vida (75 años). Esta última es mayor en Europa occidental y meridional (79 años) que en Europa oriental (69 años).
El Poblamiento:
La tasa de urbanización europea (73,3%) se encuentra entre las más elevadas del mundo.
Las mayores tasas de urbanización corresponden a los países occidentales (Mónaco, Bélgica, Luxemburgo…). Las tasas más bajas (inferiores al 50%) se registran en Albania, Bosnia-Herzegovina…
Por lo general, las ciudades europeas no son demasiado grandes; abundan las de tamaño pequeño y medio. Las grandes ciudades han experimentado un proceso de expansión hacia las periferias urbanas, cada vez más extensas.
El principal eje urbano europeo, donde se concentran las mayores aglomeraciones de población y las principales actividades económicas y redes de transporte, es el conocido como dorsal europea. Esta se extiende desde el Reino Unido hasta el norte de Italia e incluye áreas metropolitanas, como las de Londres, París y Milán, y varias conurbaciones en el Reino Unido, Alemania y Países Bajos. De este núcleo central parten otros dos ejes: uno (Roma, Milán, Marsella, Barcelona), que constituye un área en expansión económica y urbana; el otro eje discurre por Europa central y del este hasta la Federación de Rusia y cuenta con importantes centros urbanos (Berlín, Varsovia, Budapest, Kiev, Moscú, San Petersburgo).
Las zonas periféricas del norte, oeste y sur del continente, poseen una menor actividad y sus ciudades (Madrid, Atenas, Lisboa, Dublín) están peor conectadas con los grandes ejes urbanos europeos.
Dentro de la red urbana europea, cada ciudad ocupa una posición jerárquica determinada. Destacan las grandes metrópolis de ámbito mundial (Londres y París), continental (Moscú, Berlín, Milán, Milán, Roma, Madrid, Barcelona…) y nacional (Dublín, Nápoles…), seguidas de las ciudades medias y pequeñas (Verona, Florencia, Estrasburgo, Toledo…).
Las Actividades Económicas:
En Europa existen dos realidades económicas: la de Europa occidental, muy desarrollada, y la de Europa centrooriental, menos avanzada. Los países de Europa centrooriental han padeció una grave crisis política, social y económica y presentan, en general, un menor nivel de desarrollo que los países occidentales.
Sector Primario:
Este sector ha ido perdiendo importancia en el conjunto de la economía europea; así ha disminuido el número de trabajadores empleados en este sector. También se ha reducido su aportación al PIB. La actividad agrícola está más mecanizada en Europa occidental; su producción se destina al comercio. Cada región europea se ha especializado en diferentes actividades agrarias.
Europa sigue siendo una de las principales potencias pesqueras mundiales, a pesar de que la pesca se encuentra en proceso de reconversión (reducción del número de trabajadores, modernización de la flota…). Además, el agotamiento de los caladeros europeos obliga a firmar acuerdos pesqueros con países de otros continentes.
Sector Secundario:
La industria ha sido el motor el crecimiento económico en Europa. Todavía hoy, su aportación al PIB es elevada y emplea a numerosos trabajadores, aunque han disminuido en las últimas décadas. Las principales fuentes de energía que se utilizan en el continente europeo son el petróleo y el gas natural (que proceden de la importación de otros contenientes). La producción de energías renovables está creciendo, pero aúnes bastante escasa.
Las diferencias entre las distintas zonas industriales de Europa son notables. Los países europeos occidentales se encuentran entre las mayores potencias industriales del mundo, con actividades muy dinámicas y modernas, importaciones del mundo, con actividades muy dinámicas y modernas, importantes empresas multinacionales, trabajadores muy cualificados y elevadas inversiones en I + D + i. Las principales ramas industriales son la automovilística, la textil, la alimentaria, la siderúrgica, la metalúrgica, la química, la electrónica, la óptica y la aeronáutica.
En los países europeos orientales la industria ha experimentado un proceso de reconversión para hacerla más productiva y competitiva. La favorable evolución con trabajadores muy preparados, está permitiendo la inversión de capital extranjero. El desarrollo económico de Europa oriental se ha visto impulsad por el ingreso de algunos países de la zona en la UE. En el este de Europa, las principales industrias son la metalúrgica, la de maquinaria, la automovilística, la química, la alimentaria, la textil y la electrónica.
Sector Terciario:
El sector terciario es el más destacado de la economía europea, ya que es el que emplea a un mayor número de trabajadores y genera más riqueza.
El comercio tiene gran importancia en la economía de Europa occidental; que ocupa una de las primeras posiciones mundiales en los intercambios internacionales de mercancías. Europa importa manufacturas y fuentes de energía y exporta maquinaria, automóviles, material de transporte…
Los transportes europeos son modernos y eficaces. Existe una red muy densa de carreteras y ferrocarriles, así como importantes puertos marítimos (Rotterdam, Amberes, Hamburgo, Algeciras, Marsella, Le Havre…) y aeropuertos (París, Londres, Fráncfort, Ámsterdam, Madrid…), que se sitúan entre los primeros del mundo.
El turismo es una actividad económica muy relevante, sobre todo en países mediterráneos como Francia, España e Italia, que son tres de las mayores potencias turísticas que visitan Europa central y oriental, sobre todo Polonia, la República Checa, Eslovaquia y Hungría.
Junto al turismo de sol y playa (Italia, España…) se desarrolla el deportivo (Suiza, Alemania, Austria…), el artístico-cultural (Italia, Francia, Países Bajos, España…) y el de naturaleza (Francia, Italia…).
2.- LA UNIÓN EUROPEA
El Proceso de Integración:
La Unión Europea (UE) es una agrupación de países europeos que tienen en común varia instituciones, en las que delegan parte de su soberanía.
La actual UE es el resultado de una serie de tratados y acuerdos.
La configuración de la UE:
· Tratado de París (1951). Se creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA).
· Tratado de Roma (1957). Se constituyó la Comunidad Económica Europea (CEE) o mercado Común, cuyos principales objetivos fueron la libre circulación de personas, mercancías, servicios y capitales y la supresión de las aduanas y los aranceles (unión aduanera).
· Acta Única Europea (1986). Se impulsó la integración económica y monetaria y se reforzaron los fondos estructurales.
· Tratado de la Unión Europea o de Maastricht (1992). Se creó la Unión Europea (UE) y se fijaron sus tres pilares: Unión económica y monetaria, cooperación en política exterior y de seguridad común y colaboración en asuntos de justicia e interior.
· Tratado de Ámsterdam (1997). Se reforzó la libre circulación de personas, la política social, centrada en el respeto de los derechos humanos, y la seguridad común.
· Creación del euro (1999). La moneda única entro en circulación en el año 2002 en la mayoría de los países de la UE.
· Tratado de Niza (2001). Se reformaron las instituciones comunitarias y el reparto de poder y de competencias de cara a la nueva ampliación de la UE.
· Tratado por el que se establece una Constitución para Europa (2004). Recoge el contenido de
una Constitución para Europa. Esta constitución no entrará en vigor hasta que no haya sido ratificada por todos los estados que integran la UE.
Las Ampliaciones de la Unión Europea:
Tras su creación en 1957, la CEE (actual UE) ha experimentado varias ampliaciones, pasando de los seis miembros iníciales a los veintisiete actuales.
Las dos últimas ampliaciones (2004 y 2007) han supuesto la integración en la Unión Europea de doce países de la Europa centrooriental.
Antes de incorporarse a la UE, estos países han tenido que realizar mejoras en su economía (modernización de diversas actividades, construcción de infraestructuras, legislación protectora del medio ambiente…). Para llevar a cabo dichas mejoras, estos países han recibido ayudas de la Unión Europea.
La incorporación de nuevos países ha aportado más de 15.000 millones de euros al presupuesto de la UE. Por otra parte, la ampliación de la UE y en instituciones, como la Organización Mundial del Comercio. También ha hecho necesaria una reforma de los organismos comunitarios.
La Integración Económica:
La política económica de la UE se fundamenta en la Unión Económica y Monetaria (UEM). La unión económica es posible gracias a la adopción de políticas comunes en diferentes ámbitos:
· Política Agrícola Común (PAC). Tiene como finalidad principal promover una producción agrícola de alta calidad, respetando el medio ambiente. La PAC también proporciona ayudas a los agricultores y a los ganaderos con el fin de que disfruten de un nivel de vida adecuado.
· Política Pesquera Común (PPC). Tiene como objetivo primordial explotar los recursos acuáticos teniendo en cuenta aspectos medioambientales, económicos y sociales. También se ocupa de la flota pesquera y de la agricultura y negocia y firma acuerdos pesqueros con países ajenos a la UE.
· Política energética. Su objetivo principal es garantizar el abastecimiento energético a todos los consumidores de la UE a un precio asequible. También pretende constituir un mercado europeo de la energía.
· La Unión Económica y Monetaria (UEM). Se inició en 1990 con la liberación de los movimientos de capital entre todos los estados de la UE. Finalizó en 1999 con la adopción del euro como moneda única en la mayoría de los países miembros de la Unión Europea. El euro ha favorecido el incremento de las relaciones comerciales al eliminar los cambios de moneda. También ha contribuido a la estabilidad de los precios.
El Banco Central Europeo (BCE) es la institución de la UE responsable de gestionar el euro y garantizar la estabilidad de los precios (lo que equivale a dirigir la política monetaria de la UE).
Por su parte, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) presta dinero para la realización de infraestructuras de transporte y proyectos medioambientales. También concede créditos a pequeñas y medianas empresas, a los países candidatos a ingresar en la UE y a países en vías de desarrollo.
Las Instituciones de la UE:
Los países de la UE comparten una serie de instituciones políticas y administrativas.
Principales instituciones de la UE:
Parlamento Europeo:
· Composición. Está formado por eurodiputados, elegidos por sufragio universal por los ciudadanos de los países miembros cada cinco años.
· Funciones. Las principales son legislar, función que comparte con el Conejo de la UE (codecisión, controlar el funcionamiento de la Comisión Europea y aprobar el presupuesto de la Unión Europea. Esta última tarea la realiza conjuntamente con el Consejo de la UE.
· Sede. Sus sesiones se celebran en Estrasburgo (Francia), donde tiene su sede principal; realiza también actividades en Bruselas (Bélgica) y (Luxemburgo).
Consejo de la Unión Europea:
· Composición. Está formado por los ministros de los países miembros, y se reúne en función de los temas que se aborden: agricultura, asuntos sociales, economía y finanzas, etc.
· Funciones. Sus funciones principales son la legislativa, la presupuestaria y la de coordinación de las políticas comunes.
· Sede. Está en Bruselas, pero también se reúne en Luxemburgo y n diferentes países de la UE.
Los jefes de Estado y de Gobierno de los estados miembros se reúnen como Consejo Europeo hasta cuatro veces al año. En estas reuniones o cumbre deciden la política general de la UE.
Comisión Europea:
· Composición. Está formada por un presidente (elegido por los gobierno de la UE) y por los comisarios, uno pro cada estado miembro. Cada comisario se ocupa de un área específica (medio ambiente, asuntos pesqueros…) de la UE.
· Funciones. Se encarga de presentar propuestas legislativas (iniciativa legislativa) al Consejo de la UE y al Parlamento, así como de controlar la aplicación y ejecución de las políticas de la UE y de gestionar el presupuesto.
· Sede. La Comisión Europea tiene su sede principal en Bruselas.
Tribunal de Justicia:
· Composición. Está compuesto por un juez de cada país miembro de la UE.
· Funciones. Su función es velar par que las leyes comunitarias se interpreten y apliquen de la misma manera en todos los países de la UE.
· Sede. El Tribunal tiene su sede en Luxemburgo.
Tribunal de Cuentas Europeo:
· Composición. Lo compone un miembro de cada estado de la UE.
· Funciones. Tiene el cometido de comprobar si los fondos de la UE se gestionan correctamente.
· Sede. Se encuentra en Luxemburgo.
Los Desequilibrios Económicos y la Política Regional:
En el interior de la UE existen mercados contrastes económicos. Los indicadores económicos (PIB por habitante, población ocupada por sectores, tasa de desempleo…) son variados.
Asimismo, las infraestructuras y servicios ponen de manifiesto diferentes grados de bienestar en los países de la Unión Europea.
El objetivo de la política regional de la UE es aproximar el nivel de vida de los diferentes estados miembros a la media de la Unión Europea. Para corregir los desequilibrios económicos entre los países que integran la UE, esta dispone de diversos instrumentos:
· Fondos Estructurales. Se destinan a reducir las diferencias de desarrollo entre las regiones y estados de la UE. Existen cuatro fondos principales:
· Fondo Europeo de Desarrollo regional (FEDER). Proporciona ayudas para construir infraestructuras y realizar inversiones.
· Sección del fondo agrícola común de la UE destinado al desarrollo rural. Concede ayudas para promover el desarrollo rural.
· Ayuda financiera a las comunidades de pescadores como parte de la Política Pesquera Común. Tiene como objetivo ayudar a la actividad pesquera y a la acuicultura a adaptarse a la demanda del mercado y a los recursos existentes.
· Fondo Social Europeo (FSE). Impulsa el acceso al mercado de trabajo de los desempleados financiando actividades formativas.
· Fondo de Cohesión. Favorece a los países que tienen un PIB inferior al 90% de la media de la UE. Se destina a financiar proyectos medioambientales o de mejora de las redes de transporte.
El Papel Económico de la UE en el Mundo:
La UE aplica una política comercial común respecto a otros países. También constituye un enorme mercado, ya que en los países de la UE residen casi 500 millones de personas.
La UE cuenta, además, con importantes empresas multinacionales. La moneda única europea, el euro, se ha convertido en una de las divisas más fuertes del mundo, lo que ha reforzado aún más el peso de la UE en la economía internacional.
El Papel de España en la UE:
Desde su incorporación a la CEE (actual UE) en 1986, nuestro país ha ido ocupando un papel cada vez más destacado en el panorama europeo. Cuando España ingreso en la CEE, sus condicione económicas, sociales, etc., eran diferentes a las de los restantes países que la integraban, ya que sus estructuras socioeconómicas estaban atrasadas y su democracia era reciente.
Como consecuencia, España se vio obligada a adaptar su economía a la del resto de la CEE. Así, tuvo que reestructurar y modernizar diversas actividades económicas, especialmente la agricultura, la ganadería, la pesca, la minería, la siderurgia y la construcción naval.
Nuestro país fue uno de los miembros de la Unión Europea que adoptó el euro como moneda en 1999.
El resultado del esfuerzo económico que España realizó ha sido un crecimiento económico superior al de la media de la UE, que ha permitido acortar diferencias entre nuestro país y otros de la UE como se refleja en el PIB per cápita y en la mayoría de los indicadores socioeconómicos. El desarrollo de la economía española se ha visto impulsado también por los fondos procedentes de la Unión Europea.
España participa en las instituciones comunitarias. Cuenta con diputados en el Parlamento Europeo, así como con los representantes correspondientes en la Comisión Europea, el Consejo de la Unión Europea, el Tribunal de Justicia, y el Tribunal de Cuentas Europeo.
Asimismo, nuestro país está representado en el Comité Económico y Social y en el Comité de las Regiones. Por otra parte, en España tienen su sede diversas instituciones de la UE y existen también representaciones de algunos organismos comunitarios. España ha ejercido la presidencia de la Unión Europea en los años 1989, 1995 y 2002. Ostentará nuevamente la presidencia de la UE en el año 2010.
España ha impulsado diversas medidas en la UE, como la creación de la ciudadanía europea. Igualmente ha contribuido a potenciar las relaciones de la Unió Europea con Iberoamérica y el norte de África.
Nuestro país cuenta con una Representación Permanente de España ante la Unión Europea. Esta institución se encarga de proteger los intereses del Estado español en la UE. También se ha creado una Conferencia para asuntos relacionados con las Comunidades Europeas, cuya finalidad es asegurar la presencia de las comunidades autónomas en las reuniones sectoriales de la Comisión Europea.
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